metamorfosis postmoderna

debería dejar un lugar para descansar,
un sitio VIP, una terracita hacia el mar…
mientras mi mejor parte ande emocionalmente de mi lado
tendré fuerzas para seguir con lo que venga.

sube a la plataforma de carbón vegetal,
allí olerás a despecho, podrás respirar por la herida
y mostrarte desnudo de blanco nuclear
lejos del humo como ofrenda.

la vida cabe en un ombligo si es tuyo
aunque preguntar temiendo hurgar no va conmigo…
este abril fue duro, joven e impaciente
en realidades memeables
donde dos extraños se besan sin ganas
y yo pido fuerzas a Pegasso
porque con ese culo hay que meterla hasta el alma .

no hagas caso ni apoyes la estereocracia
si el que pincha tiene brazo de hierro,
corbata blanca y perfume de cucaracha.
su alquimia escatológica engaña
y apesta a mazo falso, a verde guarro.

me da igual que llegue tarde si al final llega…
derramo leche gore en la cara, mancho paredes
y agarro en crudo
hasta que llega la sopa de calamar.
cuando la noche coge la palabra
ya es difícil callar
aunque nos cosa la boca la Harpía Cuore
con hilos de roca y vegetación rala.

no es que quiera incomunicarme,
es que escribo.
me subo por las paredes si se hace tarde,
trato mal mi salud y llego mal a cualquier parte.
sin límite de conexión no conecto
pero hackeo un satélite como un pirata fantasma.

le falta pólvora al juguete, modo vibrador
que controle otra mente en silencio.
dame más y más sentimientos,
no quiero morir asesinado por el intelecto
en secuencias bullying interminables.

quiero inventar una sonrisa inmutable
hecha collage con las revistas de mi madre,
autofagiar mi estado imperfecto
porque allá donde voy
si no soy práctico no soy bello.

Kuniko.be (Flickr) licensed by CC BY-NC 2.0

más o menos hombre

me gusta poner el emoticono corazón al chatear
me gustan las cosas kawaii, las personas cute
y un cariñoso etcétera.
me gusta dormir como un bebé
me gusta flipar como un adolescente
me gustan los abrazos planetarios
y por eso quiero llorar mucho
de alegría, a carcajadas, de desahogo.

no me gusta nada cuando piensan, dicen, creen
que la sensibilidad es sinónimo de debilidad
que demasiado amable igual a tontito
que ser vulnerable te hace inofensivo,
el discernir lo gay de lo hetero en escala vertical
el estereotipo de género que anula mi identidad
porque no sigo tu puto rol cliché
más simple, más cabrón, más hermético
que piensas, dices, crees que es más masculino.

Kuniko.be (Flickr) licensed by CC BY-NC 2.0

balada de las noches bravas

estoy en alguna parte de la noche
pensando en la chica que fuma
porque no sabe de qué morirse.

y soy tu Pablo, corazón,
cuando haya que darse vida,
limpiar el barro
compartir bebida
y abrazo abrazo abrazo…

que no se te olvide
estés donde estés, yo estoy aquí.

que dejarme cinco posdatas
da buena suerte
y encima te delata las intenciones:
el no querer despedirte
nunca del todo
y siempre hasta la próxima.

sabes a andén de trenes perdidos…
donde la hora no merece la pena
porque la espera merece la alegría.

y no importa que sigas llegando tarde,
llégame todo lo tarde que quieras
porque es que tú llegas
para quedarte,

siempre tarde
siempre tú
y nunca sin olvidarme.

Kuniko.be (Flickr) licensed by CC BY-NC 2.0

retrato.jpg

acabo fumado por mi libre pensamiento,
me asfixia esta ciudad amarilla…
no alcanzo la cuerda para deslazar esta cesta
de esta una merienda de locos.

beber entre la cirrosis y la sobredosis vaginal
fue mi heterosueño durante muchos años.
practicamos el carpe diem degenerado,
el doble rasero, la hipocresía sin prejuicios…

tengo que salir a comprar ropa para hacer ver que he cambiado,
tengo que hacer algo con mi pelo y mi timeline…

soy un ñoño pero no un descerebrado,
busco la alegría prometida: un futuro seguro.
pero anda suelta una diclonius asesina y cariñosa
a la que envidio
pues también quisiera miembros invisibles
y acariciar o matar telekinéticamente.

astas de oreja de gato para captar WiFi, no necesito nada más…
tengo esta angustia por exceso de opciones,
tiranía de elección que me inmoviliza con fatiga decisoria
y lentito me vuelvo para reaccionar
porque uso candados sin llave
para sentirme seguro coartando mi libertad.

¡hacedme cambiar a leches para sentir la gloria!
algune que se ofrezca
a justificar el fin con sus medios
y mueva el peón para convertirme en reina.

nadie debería ser reflejo de quienes le odian,
por eso, mirar hacia atrás es lo más difícil de hacer…
porque mi mente crea problemas que no existen
y siento todas las flores del mundo
saturando mi olfato
hasta la insipidez.

qué obstinados llegan a ser los humanos
con su reciclaje ideológico…
la más lamentable torpeza de hacerlo mal creyendo que va bien,
el absurdo de sacrificarse
por algo sin forma y tan ridículo como “el amor”.
cualquier día grito una carcajada
por no tener objetivos coincidentes contigo,
cualquier noche vendo mi estado de crisismo
por el sueño más barato.

los algoritmos de estas máquinas deducen mis gustos,
conocen mi agorafobia y mi lado oscuro…
no tienen miedo y eso me transmite seguridad
aunque sean inertes
y yo soy así pero no estoy seguro,
soy bonito aunque las fotos digan lo contrario
y aunque me castren emocionalmente
veré un precioso origami en vez de caos y desastre.

no sé las fechas aunque recuerde casi todo:
un vacío que pesa
con alguien cortando cebollas gigantes
contigo en auxilio en el reino cuántico,
PERO…
en internet nadie puede oír tus gritos.

Kuniko.be (Flickr) licensed by CC BY-NC 2.0

el puto medio

te cuento, superado por la testosterona ansiosa de erotomanía literaria, mis adicciones, con expresiones drogadictas que hagan entender la mierda a la que me engancho. no sería la primera vez que el lujo romántico de Baz Luhrmann me haga tener sueños Channel n°5 y por eso deseo que ojalá un beso de Mary Jane me hiciese dormir, para así descansarme tantos sentimientos enormes dentro de un cuerpo tan delgado. partir el cariño por generosidad: eso es compartir... pero romper es partir mitades por temor. ya te digo, mis latidos van al cielo, amor, como si fuesen fuegos artificiales.
creo que la manera de resucitar a un pasado muerto es con una sobredosis de electricidad, ya sea provocada por dos pieles que chascan cuando la estática se descarga o por ese temazo que pones en bucle porque te emociona. podríamos besar o hablar con cualquiera porque podemos hacerlo con cualquiera y es que siento un vacío falto de magia en un mundo lleno de muggles. necesito que me desbloqueen alguna emoción sin perforarme: házmelo etéreo primeramente, para después abrirme de un tajo y pelarme como una cebolla, quitar capas y capas y capas hasta tocarme “ahí"... donde más siento.
mis sinceridades te han anegado y ya no puedo esconderme, sólo queda una migaja de misterio con la que no sé qué hacer. soy uno más de esos cuerpos que quieren ser purgados de sí mismos, soy de la generación perdida, esa que necesita una frase elevada que todo lo cura y todo lo puede, sí, ya sabes, esa mierda heredada del Romanticismo que es epidemia en la sociedad que vivo. por eso puedo decir cosas "hermosas", añadir algún gramo de cursilería a lo que expreso (porque si no… no me como un rosco), también puedo decir que maté una parte de mi mismo para mantenerte viva. aparte, puedo exigirle a la nada todo... pues estamos en la era del vacío donde tenerlo todo es como no tener nada, donde caer en contradicciones es poético y los zombies son de Marte y los vampiros de Venus.
odio la infancia y la vejez, me llamo sarcasmo. me gusta el punto medio pero odio a los moderados, son gente peligrosa poco pasionales, son ultracuerpos invadidos por aliens… me gusta el punto medio porque un punto nunca es unidimensional y porque si te pones en medio nos encuentro equilibrados.

Kuniko.be (Flickr) licensed by CC BY-NC 2.0

ANA

Ana
es el nombre de todas las mujeres
Ana es brillante
y pálida
Es nieve bajo la nieve.

Es invisible bajo los árboles
desnudos
Ana sonríe
siempre que está triste
mojada
Ana abre corazones
y los vacía
Abre sus brazos y sus piernas
y su boca

Es simétrica como su nombre
huele diferente
fuma y eyacula.
Ana es capicúa
un boceto abandonado
una consonante
necesaria
como ella.

Ana…
¿cuál es tu nombre?

Kuniko.be (Flickr) licensed by CC BY-NC 2.0

el sandwich más tierno del mundo

lo que empecé ya se hace viejo pero no caduca.

paso un kiosco con fotos retro y el mundo ya no es tan moderno,
me pido un pincho de tortilla con bravas
y echo de menos que me robes la comida…
luego te comería toda en la cocina.
al final del día vuelvo a casa
y sólo quiero comer
contigo o sin ti.

juzgar los polvos que hacen que el tiempo sea un círculo
que empezó sin aviso y que siento que no se cierra
y si fuese esperma moriría en la garganta
antes que alcanzar el óvulo.

abrir un tarro de mermelada para no romperte la cabeza
en abrir mi cabeza.
cuando estoy ebrio la mujer es una botella,
cuando estoy empanado se me pasa el arroz
y hoy, simplemente no estoy.

hay que comprender a los peces
cuando tienes antojo de sirena con piernas.
no hago caso al pack Heineken de oferta
si me apetece algo con cuerpo y espuma, es decir:
irme a la playa contigo de vacaciones.
el marketing satisface o crea necesidades pero
odio poner un precio con rostro,
echar las cuentas,
mirar mi cartera
y sentirme vacío como ella.

las sobras que no comas las meto al frigo,
hay un cachito de mi corazón en tupper
y es que para querer todo vale…
jurarnos amor
en el puente de la calle 6 de L.A.
antes que en el puente Milvio.

desenvolver el nylon del invierno que nos envuelve
y hacer pizzas caseras para cenar juntos.
eres una ensalada caníbal que curas mis moqueos
y no pienso tomar paracetamol con velas
o mirar a los lados con un semáforo verde estancado.

ya te lo digo como dice la canción de Rú:
voy a comerte…
porque tú

eres el sandwich más tierno del mundo.

Kuniko.be (Flickr) licensed by CC BY-NC 2.0

Trinitrotoluena Madrid

Hablemos de literatura,
tú que manejas la lectura bajo cuerpos
que te gusta leer
labios
miradas
gestos
ticks

Eres pájaro libre
de alas desposeídas,
vuelo a tu vera si estoy cerca
y me encanta
que suceda así contigo.
Acaparas mi atención por la noche
con una schweppes neón
que alumbra este santuario en casi ruina.

Me ofrezco
como tu trocito de Nueva York,
un admirador bastardo
de los héroes de la generación beat.
Me ofrezco desvelado
hasta colmar la cuchara de azúcar,
sacarte la puntita
al poner acento como punto erógeno,
ser lengua de fuego
clavándose en tu oído.

El anti-glamour capital
por el reino de la Gran Vía
marca este capítulo
pues me siento pequeño…
incluso oprimido por una sonrisa
esquizofrénica
Por eso voy a dejar un beso delgadito mío
y a ver qué pasa,
quién empieza…

Es difícil no pensar
cuando eso es lo que mejor hacía.
Es difícil pensar
en cualquier lugar sin verte la cara
y mucho más difícil es…
callar secretos que gritaría.

Kuniko.be (Flickr) licensed by CC BY-NC 2.0

estás ahí

aunque fumiguen los cielos para generar sequía
voy a cultivar un río con lágrimas de la risa.

aunque los rotos ya no sanen
nos camuflas con estilo entre la moda alienante
y así relamo mis dientes
bajo una piel de cordero sintética.

soy la rebelión de una persona solitaria,
otro triste hedonista
que no sabe dormir al lado de nadie
y hace cobras por autoreflejo
porque sabe que el veneno de serpiente actúa lento,
los niños no somos tontos.

me fascina el halo de locura, los falsos milagros
frutos de la casualidad…
la pota fruto del exceso
que te recuerda lo frágil que eres.

me excita la escapadita que sale bien
convertidos en criaturas de la madrugada
con un ciego iluminado que nos advierte
que el futuro es una bota aplastando tu cara
con una suela de marca.

eres el tonto supremo
que en vez de ver la depresión del falso literato
se hace a un lado y me hace más humano,
inventas un kit de supervivencia exprés
como si fueras un camaleón bañándose en confeti
y entre gilipolleces dices que me quieres.

si algo me has enseñado es que los sueños
no se cumplen,
se hacen…
y vivir es cargar con ese peso muerto,
y madurar es comer cualquier cosa sin quejarse:
es comer crudo.

me gusta salir contigo
cuando quiero género fresco,
me gusta salir de la oscuridad y hacerme el duro
aunque esté hecho de tarta por dentro…
me gusta sentir dolor e inutilidad y querer llorar,
y que, sin embargo, mi extraño dolor
sea divertido

porque estás ahí conmigo.

Kuniko.be (Flickr) licensed by CC BY-NC 2.0

a 2000 besos de profundidad

Tus movimientos son un beat que se repite
y de tan contenido ritmo ando desbordado.
Detrás de ti…
una persecución amañada,
el ritmo asincopado del universo:
flujo insuflando voltios a una máquina hidráulica.

Se tira y contrae la materia prima encogida
hasta asomarse vaporosa fuera del colchón.

Soy fetichista de espaldas,
hacemos sprint con ese estilo que nos sienta tan bien
y descuelgas tu pecho de botones
con esa sonrisita entre colmillitos.

Empiezo a versarte entera
con los oídos morfinizados por Cohen
en canciones de amor y odio.
Empiezas a besarme entero
toda prendida danzas y te descompones
hasta el fin de los finales,
bailando, hasta el final del amor…

Kuniko.be (Flickr) licensed by CC BY-NC 2.0

dieciséis ardiendo

Él quería saber a qué temía
para aprender a amarlo.
Pensó un día que si no amara
no tendría miedo de nadie.

Así se recupera por memoria intravenosa
y algún infierno calma
deshonras jóvenes,
emociones de estar a distinta altura
y no respirar igual,
no sentirte vivo al tocar el cielo…

Sensacional canto a la desmesura
sobredosis legales
de cuerpos inquietos
por pasión amortajada.
Mala prisa
mientras gire un carrusel poseído
por la feria y su fiesta empedrada
en la que ambos tropezamos.

Rechacé los regalos a mi diosa
y sumergí cositas buenas
hacia el ámbar:
una visión soleada.
Quise sábanas limpias
pero adoras entintarme
y resucitar con voz post-coito
mis cadáveres encerrados.

Tienes excusas
aprehendidas en tus nubes de cigarro
donde escondernos detrás
con aire sofisticado o humos de adulto.
Tengo manías
para anudarme el cuello
y tener malos hábitos:
esposas sin llave y chupitos gratis.

Llegó como una sorpresa
que no estaba planeada
y algo pasó
que nos es ilegible
pero sentimos muy lúcida
y ardiente por dentro:
una arista redondeada
con dos caras de poema.

Porque en mi primera vez…
el mundo fue un helado recién abierto.

Kuniko.be (Flickr) licensed by CC BY-NC 2.0

la tristeza es sexy

empiezo de golpe

porque sí, por razones como que:
el dolor puede ser el mejor maestro.

venga, dame
golpes en la puerta
golpes en un meñique
golpes que no se sienten

he vuelto con ese pensamiento otra vez…
y está bien
porque mejor pensar sobre uno
que excesivamente en los demás.

que dudo que sea un boomerang
que siempre vuelve aunque lo lances lejos
y no es que espere algo a cambio siempre
(eso sería egoista)
pero, oye, hay muchas maneras de dar las gracias

así que cuidado con darlo todo
que te quedas sin nada

y en la nada no hay nada para golpear.

todo se rompe
como una escultura que es recuerdo
o
como un egoismo indestructible,
y así se acaba: de golpe.

siento la hostia pero
tú sigue soñando…
que los sueños, igual que los espejos, se rompen.

por eso amo la noche
porque es salvaje y educada.
porque para amar hay que volver al pasado y matar de nuevo

NECESITO
un disparo de corazón, de verdad,
y que la sangre me llegue hasta las rodillas
mientras me violen las novias de Drácula.

necesito un cuerpo
un tanque de gasolina suicida
para volverme loco
igual que cuando a un perro le pones carne delante:
miran y salivan desquiciados por instinto
porque no pueden evitarlo…

dame chicas ácidas para desayunar
cuando me llegue la depresión
y que el cartel del próximo festival
sea de corazones grandes y cabezas pequeñas,
así daría gusto tirar el dinero.

aunque la mayoría no haya sido correspondido
me enamoré muchas veces
y es injusta tu insolencia conmigo.

duele más golpearse con la nada
que con muros y despechos.

luego te quejas de que no escribo bonito,
en fin, me da pena eso…
porque la tristeza es sexy.

ayer quería verte, y lo hice
pero tú no querías verme
y fui estúpido.

cambiaremos de opinión igual que cambiamos de ropa
y seremos instigados a vivir un sueño
aunque estemos hartos…
y ya sé lo que voy a hacer,
sé que voy a a abrir los ojos
y voy a ver una pesadilla.

ya me lo sé todo
pero me hago el tonto.

Kuniko.be (Flickr) licensed by CC BY-NC 2.0

placeres desconocidos

Las canciones son canciones pero un beso sigue siendo un beso. De momento me he decidido a bailarla antes que pararme a mirar otra maquiavélica cartografía femenina. Y es que tengo dos formas de actuar y posiblemente ambas sean incorrectas. ¿Conoces el punto muerto? Es el punto donde más esperanza se alcanza y, consecuentemente, cuanto más esperas más muerto te sientes la savia adentro tuya. Si hay algo más inútil que el vacío es esto. No he sabido cómo llamarlo… pero me jode que cada vez lo llamen más por tu nombre. No es posible olvidar deprisa, no lo es… porque he tenido paciencia para saborear momentos de algodón almohadillando nuestros enseres mimándose en carpe diem de manera atemporal, que ahora va contra mis principios no poder articular ni una lágrima que deshaga con lentitud los restos que aún quedan en la superficie del (por momentos) estéril recuerdo. Ha llegado el dolor tan profundo que el odio se abre paso hacia la superficie como petróleo: a chorro, a manchas… salpicando a los demás. Seguramente molesta, pero es lo que hay. El negro es mi color alegre.

Kuniko.be (Flickr) licensed by CC BY-NC 2.0